12 de Abril 2005
Adivina adivinanza...
¿Hay algo mas triste que una pelicula de un niño ciego semi-huerfano? Sí, una película de un niño ciego semi-huerfano iraní. Maldita la hora en la que me convencen para ver estas cosas. Tienes que verla...es muy bonita...¡¡Sí, bonita y triste de cojones!! No es que me haya pasado los 86 minutos llorando (pone 86 aproximadamente), pero el temita se las trae.
A los amantes del cine independiente, puede gustarle y bastante. La trama gira entorno a un niño ciego de ocho años que estudia en un colegio de Teherán. Huerfano de madre, regresa junto con su padre al lugar de nacimiento. Este retorno le hace descubrir lo que le rodea y estudiar la existencia de las cosas.
Es una película profunda, aunque veces se echa de menos algo mas de música y a la larga se hace un poco pesada. Aun así hay detalles que merecen tenerlos en cuenta. No podemos estar pensando en las espantosas gafas que le han colocado al niño para hacer la película, ya que estaríamos dejando pasar muchos momentos "especiales". El director nos quiere meter en la piel de un niño huerfano, su padre pasa olimpicamente de él y para mas inri ciego de nacimiento. ¿Que más se puede pedir?
Y yo que me reía porque en la caratula salía una niña con lechugas en la cabeza...